Hacer marketing digital exitoso es parecido a cocinar un nuevo platillo. Si te falta un ingrediente, simplemente es probable que no puedas completar la receta o, si la puedes completar, no tendrá el sabor que buscabas. Con esto nos referimos a que, no basta con tener gráficos asombrosos o una página web que cargue a la velocidad de la luz. Hay otros factores que debemos tomar en cuenta, y uno de los más importantes son las llamadas a la acción.
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Antes, si querías decirle a una marca que no estabas satisfecho con el producto que compraste, tenías que tomar el envase, ponerte tus gafas de lectura microscópica, y marcar a ese pequeño número que viene debajo del texto “¡Queremos escucharte!”. ¿El desenlace? Una llamada que probablemente te dejaría en el mismo lugar en el que empezaste. Pero eso era antes, y ahora, bueno, es muy… muy diferente.
¿Te ha pasado que lees un encabezado de una noticia, das clic para leerla y, casi de inmediato, sales del artículo porque simplemente no te atrapó? Bueno, ahora imagina que eres tú quién escribe ese contenido que no atrapa a tu público y para el que, además, has invertido no solo tiempo, sino también presupuesto para su difusión.
Vivimos en un tiempo sin precedentes, hoy en día, lo que era novedad el mes pasado, dejará de serlo este mes. Todo va tan rápido que a veces resulta difícil seguir el ritmo. Si hay algo que nos ha enseñado la reciente pandemia por la COVID-19, es que es imposible prever qué pasará y cuándo. Por eso, estar preparados es esencial.
Hacer marketing en las redes sociales va mucho más allá de contar con una estrategia de contenido y postear algunas cosas con la frecuencia que mejor nos parezca. Hacer marketing en redes sociales significa planear de inicio a fin cómo nos vamos a comunicar de manera que nuestro público se sienta motivado a interactuar con nuestra marca.