En los últimos años hemos visto que varias empresas han optado por refrescar su imagen. Tan solo el año pasado Mastercard, la conocida marca de servicios financieros, le hizo modificaciones a su logotipo buscando alinearse con la tendencia actual, centrada en la simpleza y formas curvas y empáticas.
Lo anterior nos puede hacer pensar, ¿cuándo es el momento idóneo para hacer este cambio? Es normal esperar que nuestro logo sea completamente atemporal, esperamos que cuando todo lo demás cambie, nuestro logo e imagen ese eso que se mantenga, pero la realidad es muy diferente. Hoy en día debemos aceptar que las cosas no son estáticas, se mueven. La sociedad evoluciona y cambia, por lo que nosotros debemos hacer lo mismo.
Con lo anterior en mente es que nos hemos dado a la tarea de resumir, en 4 puntos clave, aquellas señales a las que debes prestar atención si lo que buscas es descubrir el momento clave del cambio de imagen de tu empresa. ¿Empezamos?
1. Hace a tu audiencia pensar que han viajado en el tiempo.
¿Cuál crees que sería tu primer pensamiento al visitar un sitio web construido en el año 2000? Probablemente te darías cuenta de lo anticuado que todo luce, lo que te haría pensar incluso, que es posible que el sitio esté totalmente abandonado. Las tendencias y los gustos cambian, y eso puede afectar las percepciones de tu logotipo. Lo que alguna vez fue moderno y convincente puede perder su poder con el tiempo. Cuando las personas ven un logotipo que parece anticuado, perciben que una organización no está en contacto con las mejores prácticas modernas, no solo en materia de diseño o imagen, sino también en sus procesos y servicios. Una buena regla general es considerar actualizar su logotipo una vez cada cinco años o si nota que su competencia o empresas del sector están tomando esta dirección.
2. No representa tu evolución.
Todas las empresas que sobreviven el paso del tiempo han tenido que, de alguna forma u otra, evolucionar. Estas empresas crecen en base a las oportunidades que se les presentan y las fortalezas que las definen. Todo esto significa que la misma empresa fundada en 1990, no será la misma que nos encontraremos en 2020. Como resultado, su logotipo ya no refleja con precisión lo que hace y para quién lo hace. Si ese es el caso, es posible que tu logotipo ya no sea “quien debe ser” y que sea hora de volver a alinearlo con la misión y valores de tu empresa.
3. No se sincroniza con el resto de tu marca.
Tal vez tu negocio no ha cambiado tanto, pero sí el cómo lo presentas al mundo. Es posible que en los últimos años hayas incorporado nuevas técnicas de posicionamiento y hayas empleado nuevos elementos de diseño y comunicación para darte a conocer. Siempre que realices cambios en la comunicación de tu empresa debes plantearte si estos cambios mantienen coherencia con tu logotipo. Recuerda, tu logotipo es un reflejo de la marca y, por lo tanto, siempre debes buscar que estén en la misma página. Incluso si aún te gusta tu logotipo, es una buena idea darle un pulido como parte de su esfuerzo global de cambio de marca.
4. Te limita.
Puede que tu negocio haya empezado como una empresa de renta de mobiliario para fiestas y, por esta razón, eso es lo que tu logo comunica. Ahora bien, imaginemos que hoy en día, buscando aprovechar las oportunidades que se te han presentado, te has expandido y ahora rentas y vendes una gran variedad de artículos. ¿No piensas que tal vez tu logo anterior ahora da un mensaje que no es completamente apropiado? Si sientes que tu logo te limita, es momento de que te plantees un cambio y, ya que estás en eso, esta vez asegúrate de escoger un logo más flexible.
En resumen.
Renovar tu logo no siempre significa hacer cambios radicales y cambiar por completo la identidad de tu marca, en realidad lo que significa es que debes asegurarte de que tu imagen evolucione con el tiempo y con tu empresa. Para esto es necesario que te des cuenta de cuándo tu audiencia te está percibiendo como una empresa anticuada, fuera de lugar o sin coherencia en su comunicación.
Siempre y cuando tengas en consideración los factores que describimos anteriormente, estamos seguros de que podrás tomar decisiones para tu empresa que le beneficien e impulsen aún más tu crecimiento.